Rosa Japonesa

La rosa japonesa proviene del este de Asia y llegó a Europa a mediados del siglo XIX, donde se extendió rápidamente debido a su gran adaptabilidad al clima local y su resistencia a enfermedades. Pronto se convirtió en una planta favorita en parques y jardines.

Características de la rosa japonesa

La planta madura puede alcanzar una altura de 1-2 metros, es ornamentada, caducifolia y espinosa. Es resistente al frío en primavera e invierno, así como a la sequía. Sus hojas son arrugadas y de un verde brillante, y en otoño adquieren un color amarillo.

Sus flores son grandes, tienen un aroma agradable y florecen desde mayo hasta finales de verano, incluso hasta que llega el frío. Su fruto es grande, de color rojo o naranja, y puede llegar a medir entre 2 y 3 cm de diámetro, siendo carnoso. Es interesante que las flores y los frutos sean visibles al mismo tiempo. El fruto se puede consumir fresco o seco, aunque tiene un sabor más ácido que la rosa silvestre. Contiene una gran cantidad de vitamina C.

El cuidado de la rosa japonesa

No tiene grandes exigencias de suelo, pero no tolera suelos calcáreos, ya que es sensible a ellos. Prefiere suelos ligeramente ácidos. No requiere un suelo compacto. Le gusta estar en un lugar cálido, soleado y protegido del viento, ya que necesita mucha luz y ahí sus frutos serán de la mejor calidad. No florece en lugares oscuros, sus hojas caen y la planta se muere. Es resistente a enfermedades, pero requiere riego regular para lograrlo. Si se mantiene en condiciones secas, su crecimiento inicial se detiene, se debilita en 1-2 años, envejece y muere.

Rosa japonesa en maceta

Las rosas japonesas también se pueden mantener en macetas. No necesitan una maceta grande, ya que tienden a hacer crecer las raíces hacia los bordes de la maceta y dejan la parte central vacía. Sin embargo, de esta manera, las raíces solo pueden desarrollarse parcialmente. Se requiere riego regular, pero hay que tener cuidado de no dejar que el agua se acumule debajo de la maceta, ya que esto puede provocar enfermedades. Manténgala en un lugar cálido y soleado.

La poda de la rosa japonesa

En general, no requiere poda, pero si deseamos que produzca hermosas flores, de vez en cuando no está de más hacerle una poda. La poda de ramas es más adecuada a principios de primavera, momento en el que también podemos darle forma de arbusto. También podemos renovar los tallos envejecidos recortando todas las ramas a unos 10 cm por encima del suelo. Necesita riego regular durante períodos secos, de lo contrario envejecerá prematuramente.

La propagación de la rosa japonesa

Se puede propagar de dos formas:

  • Por esquejes

Para ello, se necesita un brote fuerte del mismo año que tenga como máximo 10 cm de longitud. Este esqueje se debe enterrar en un sustrato suelto a una profundidad de 2-3 cm y esperar a que enraíce.

  • Por rebrotes de raíz

En este método, se deben plantar los brotes que se encuentran en las puntas de los tallos y, una vez que hayan desarrollado raíces, se deben separar de la planta madre.

Precios de la rosa japonesa

Esta planta floreciente está disponible en casi todos los viveros y los precios de la rosa japonesa no se consideran muy altos en comparación con otras variedades de rosas.

https://es.wikipedia.org/wiki/Rosa

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